La decoración del acuario es importante no sólo por proporcionar a los peces un ambiente lo más natural posible, sino por el aspecto estético del mismo. Hay que procurar que los animales acuáticos se encuentren en un entorno que refleje su hábitat natural para obtener lo mejor de los peces en su comportamiento, aspecto físico, reproducción, salud, etc.
En el momento de comenzar con la decoración de nuestro acuario marino, hay que considerar un aspecto fundamental: el peso total del acuario. Éste es un dato importante porque al acuario, además de la capacidad en litros, se le deberá agregar el peso de la arena, rocas y demás elementos de decoración que tienen un peso mayor que el del agua, al igual que todo el sistema de filtración
Corales para dar vida
Los corales ornamentales son muy utilizados por los aficionados, ya que constituyen parte del arrecife de coral. Puesto que el coral ya está muerto, a la hora de comprarlo se recomienda comprobar que no contienen restos de sus primitivos animales o de otros seres vivos que habían instalado ahí su hogar. Como limpiar el coral requiere un tiempo considerable, se aconseja obtener estas piezas directamente en tiendas especializadas, porque contarán con elementos decorativos ya procesados, es decir, listos para su instalación. Si se obtienen por otra vía, hay que tener en cuenta las siguientes pautas:
1. Sumergir el coral en una solución de cloro para uso doméstico donde permanecerá durante una semana. Durante los siete días siguientes lo mantendremos en el agua, que cambiaremos varias veces hasta que haya desaparecido el último vestigio de olor a cloro. Habrá que repetir estas operaciones de limpieza mientras que siga teniendo una superficie muy sinuosa. Este método está bastante difundido, pero a veces cuesta eliminar el olor a cloro cuando hayamos terminado de limpiarlo.
2. Hervir el coral durante una hora, aproximadamente, y luego enjuagarlo a fondo con una manguera para eliminar las partículas sueltas. Después de dejarlo en remojo durante una noche, se le volverá a pasar la manguera y se dejará blanquear al sol, de forma natural, durante unos días antes de usarlo.
Estas instrucciones para la limpieza del coral sirven también para cualquier tipo de caracoles marinos y otros elementos decorativos que empezaron su vida en el mar. Da la casualidad, desgraciadamente, de que cuanto más atractiva parezca una pieza, más frágil será su manipulación y más cara resultará comprarla. Hasta haber adquirido cierta experiencia en su manejo, es preferible limitarse a elementos más sencillos y fáciles de manejar. También se puede, desde luego, montar formas a partir de pequeños fragmentos.
Rocalla o piedra caliza
La rocalla es una piedra caliza idónea para la decoración del acuario. Normalmente, es de color grisáceo y tiene unas incrustaciones que la oscurecen, por lo que los pasos a seguir son similares a los de la limpieza del coral, con la diferencia de que, en vez de limpiarlo en cloro diluido, hay que hacerlo en cloro puro y mantener cada roca un mínimo de dos horas dentro del compuesto para, posteriormente, cepillarla hasta retirar todo lo que forme parte de su composición.
De este modo, se limpiarán por completo las rocas hasta que queden totalmente blancas y, de paso, eliminar cualquier tipo de germen que pudiera perjudicar en un futuro a los animales.
Arena de coral
Normalmente, la arena de coral corresponde a coral molido. Si se quiere mantener el agua en estado transparente, es obligatorio proceder a la limpieza concienzuda de la arena, ya que suele venir con numerosas partículas producidas por el roce que se ha generado durante el transporte.
El método más eficaz consiste en llenar la cuarta parte de un cubo, cuya capacidad sea la de unos diez litros, con arena.
Posteriormente, se llenarán los otros dos cuartos del recipiente con agua fría y se removerá la arena dentro del mismo. Esta operación habrá que repetirla hasta que el agua salga completamente limpia. Este tipo de sustrato proporciona al acuario un aspecto muy similar a los fondos coralinos debido a que es más compacto, lo que, además, generará un área rica para la formación de colonias bacterianas.
Conchas de caracoles y caracolas
Muchos aficionados utilizan como decoración en sus acuarios conchas de caracoles que compran en el mercado pero, lamentablemente, muchas han sido tratadas con barniz o con algunos componentes tóxicos para los peces. Por lo tanto, hay que verificar cuidadosamente que estas conchas se encuentran exentas de este tipo de tratamiento antes de introducirlas para evitar lamentables consecuencias.
También es frecuente encontrar recipientes con caracolas que contienen, entre sus numerosas paredes internas, un gran número de elementos vivos que pueden ser liberados, expulsando gran cantidad de amoniaco y, por consiguiente, nitritos. Por esta razón, se aconseja verificar que están totalmente secas o, por el contrario, hervirlas varias veces y mantenerlas durante un buen tiempo al sol antes de insertarlas en el agua.
?Decoración artificial o roca viva?
Existen infinidad de elementos para la decoración de este espacio acuático y todos ellos forman un amplio abanico de formas y tamaños, premiando, una vez más, la variedad. Su elección dependerá del gusto de cada aficionado a la hora de decantarse por uno u otro artículo. Llegado el momento de la elección, hay que tener en cuenta la calidad del material, ya que algunos son tratados con materiales que en un futuro pueden ser tóxicos, tales como resinas o pinturas.
En cambio, si la decoración artificial no cala en la mente de los aficionados al mundo marino, la roca viva será una opción acertada. Está formada por carbonato cálcico proveniente de grandes esqueletos de corales muertos y de otros organismos calcáreos. Por lo tanto, como su nombre indica, esta roca contiene una multitud de vida dentro y fuera de ella. La mayoría no es recogida de los arrecifes coralinos, sino de las áreas adyacentes. Estas zonas son los lugares en donde, debido a procesos naturales y a las tormentas, se han depositado grandes fragmentos de coral muerto que han sido colonizados por numerosos organismos.
Esta roca deberá estar desprovista de todo tipo de forma de vida en claro deterioro y que pueda ser nociva o peligrosa para los animales del lugar: camarones mantis, cangrejos peludos, etc. El tratamiento de la roca viva será para todos los efectos el mismo que tendremos con nuestros peces e invertebrados. La roca se podrá introducir de golpe a la hora de equilibrar todos los componentes del acuario, o bien progresivamente hasta llegar a los niveles deseados. De todas formas, se recomienda introducirla antes de colocar a los habitantes de nuestro tanque marino para evitar posibles subidas de nitritos o amoniaco. No obstante, para aquellos que consideren que la roca viva es cara, existen otras alternativas para decorar la pecera, siempre y cuando ésta no sea del tipo de arrecife coralino, donde casi obligatoriamente habría que utilizar roca viva.
Todos los materiales decorativos, a excepción de la roca viva, deberán ser limpiados cuidadosamente. Su utilización en acuarios de arrecife ha producido un gran auge, no sólo por su forma, que nos permite realizar preciosas laderas oespectaculares rincones donde nuestros peces pueden transitar u ocultarse, sino también por el valioso contenido de microorganismos que pueden habitar en ella, ayudando así al proceso de purificación de nuestro pequeño ecosistema. Por lo tanto, hay que considerar la roca viva como un gran elemento de decoración y de filtración para nuestro acuario.
No hay comentarios:
Publicar un comentario